REESCRIBIENDO LA HISTORIA

Para muchos espectadores el último capricho del director Quentin Tarantino supondrá una auténtica patada a los libros de historia; pero para otros, una violenta catarsis, al más puro estilo del realizador que ha elevado la categoría del cine independiente hasta la de blockbuster.

Uno no podía esperar que una película que aborda el tema de la segunda guerra mundial estuviera a salvo de la imaginación de este reinventor de géneros y subgéneros, autodidacta y cinéfilo, con un sentido del humor tremendamente negro e indigesto para muchos. Y así sucede. La película se convierte en un spaguetti-western, uno de los géneros fetiche del director, que no ha dudado en colaborar con el gran compositor Ennio Morricone, autor de algunas de las melodías más legendarias de la historia del cine y más concretamente conocido por sus colaboraciones con el director Sergio Leone, autor de los títulos más emblematicos y de mayor calidad cinematográfica de este subgénero.

El argumento es sencillo: un grupo de soldados judíos que se hacen llamar los "bastardos" se infiltra en la francia ocupada con la misión de ejecutar nazis sin piedad. Mientras, una huérfana judía prepara un sangriento atentado contra la plana mayor del partido nazi. En medio un despiadado oficial alemán,que se dedica a la caza de judíos, y que aporta ,sin lugar a dudas, la mejor actuacion de la cinta( genial Cristopher Walz, actor culto y políglota).

Cabe destacar también la interpretación de Brad Pitt , en el papel del teniente y cabeza de los bastardos. Pitt es un actor cada vez más concienciado con la tarea de cimentarse una prestigiosa carrera y cuyo principal referente parece ser el desaparecido Marlon Brando; a quien homenajea con unos implantes en el mentón similares a los que ya lució este en su famoso papel de Vito Corleone.

Por lo demás, muchas dosis de violencia(otra de las señas del director), guiños cinéfilos y otra faceta  que no conocíamos en el cine de Tarantino, suspense, muy bien llevado y protagonista de quizas las mejores escenas